Bifobia

Bueno… esto es un tanto complicado de hablar para mí. No quiero que la gente piense que todos los bisexuales pensamos igual o que le tenemos odio o resentimientos con los homo o heterosexuales, pero sí debo confesar que es horrible y se siente mucha bronca cuando alguien se burla de la bisexualidad. Uno trata de tomárselo con humor muchas veces, pero llega un momento en el que es horrible, lastima y duele. Por ese motivo… hago ésta publicación en el blog. Primero se hablará de la bifobia para tener bien en claro que es y luego se les mostrará a ustedes una carta dedicada a todos los bifóbicos escrita por mí.

Bifobia:
Si buscan la palabra bifobia en el diccionario de la Real Academia Española no la van a encontrar ¿Por qué? ¡Porque no aparece! ¿Falta de interés o falta de concepto? Sin embargo esa palabra existe y aquí está su significado: La bifobia es el miedo, odio, aversión, repudio y discriminación hacia los bisexuales. La bifobia puede estar relacionada o no con la homofobia (aversión hacia los homosexuales), pero no es un requisito. El miedo u odio a la bisexualidad nace a partir de ciertos estereotipos que se les ha impuesto a los bisexuales desde hace ya mucho tiempo atrás. Los bifóbicos piensan o consideran que los bisexuales somos promiscuos, polígamos, que hacemos intercambio de parejas (swingers), que somos libidinosos y que estamos confundidos respecto a nuestra sexualidad. Esas son las principales ideas por la cual se produce la bifobia. También, cabe aclarar, que desde la década de los ’80 se acusa a los bisexuales de haber traído enfermedades de transmisión sexual a la comunidad heterosexual (e incluso a la comunidad homosexual). Muchas veces los bifóbicos incrementan su fobia basados en estereotipos de la homofobia donde, al igual que lo homófonos, pueden llegar a pensar que los bisexuales no estamos a gusto con nuestro sexo biológico. Si bien muchos heterosexuales padecen de bifobia no solo se limita a esa orientación sexual. Muchos homosexuales consideran que los bisexuales nos autodenominamos como tales para seguir conservando nuestra “reputación” de heterosexuales y que somos homofóbicas mientras disfrutamos simultáneamente de la vida homosexual. Generalmente, entre los hetero y homosexuales, consideran que la gente solo se divide en heterosexual y homosexual, dando así por entendido que la bisexualidad (así como también la pansexualidad) no existe.

Carta a los bifóbicos:

No te voy a negar que muchos bisexuales se proclaman como tal por miedo a ser homosexuales y así poder hacer su “conversión” de la hetero a la homosexualidad más fácil y de a poco. Tampoco voy a negarte que existen muchas personas (sobre todo las mujeres) que dicen ser bisexuales para estar a la moda y/o parecer más modernas. Si bien no te puedo negar eso… sí puedo afirmarte otras cosas ¿Cuales? Que no soy un enfermo ni soy un promiscuo ni tampoco un libidinoso. Que no soy swinger ni soy polígamo y por sobre todas las cosas… no estoy confundido. Soy bisexual al igual que tu eres heterosexual u homosexual. Nada tan simple como eso. No tengo la necesidad de encasillarme en una cosa ni la otra; prefiero llevar una vida pudiendo amar a personas de los dos sexos. No es tan complicado de entender. Sólo hace falta un poco de voluntad ¿No te parece? ¿Qué pasaría si tu hijo, tu mejor amigo o amiga o incluso tu pareja te confiesan que son bisexuales y sienten atracción hacia los dos sexos? ¿Dejarían de ser tu hijo, tu mejor amiga o amigo o tu pareja? No. Serían la misma persona que conociste desde un principio. Seguiría siendo tu hijo, tu mejor amigo o amiga y… seguirían siendo tu pareja ¿Sabés por qué? Porque ser bisexualidad no afecta a la personalidad, el comportamiento o las actitudes de una persona. Forma parte de la persona misma y siempre va a ser así por más que se salga del armario o por más que se calle esa atracción. Seguramente ahora te estás planteando la cantidad de comentarios que pudiste o no haber hecho sobre la bisexualidad delante de tus hijos, amigos o pareja. Está bien… ya pasó. No hace falta que te disculpes por eso (deberías, pero tristemente lamento decir que en cierto modo ya estamos acostumbrados), pero sí tienes que tener en cuenta no volver a hacer esos comentarios, ya que lastima a los demás ¿Cómo pueden hacer daño? De la manera más cruel que te puedas imaginar. Si eres homosexual y estás leyendo esto sabes muy bien lo que se siente tener que ocultar tu sexualidad y si eres hetero y estás leyendo esto imagínate como sería tener que tener cuidado cada vez que hablas de sexo con alguien o que te hagan preguntas incómodas donde no puedas decir la verdad sobre algo o… peor aún… que hablen mal delante de ti sobre la sexualidad que tienes. Es horrible y te sientes prisionero, con falta de libertad y de expresión. No podés hablar ni expresarte con comodidad con casi nadie ¿Qué harías entonces? Lo que hacemos muchos de nosotros cada vez que se habla de bisexualidad. Algunos miran el suelo, otros miran para todos lados con el temor de que los descubran, muchos otros solo se ríen para ocultar que sienten un puñal en el corazón ¿Por qué nos afecta tanto? Porque es quienes somos y ser discriminado es una sensación tan horrible que no se la deseo a nadie. No hay necesidad de tener que pasar por eso por culpa de que una sociedad no te acepta; es muy injusto hacer pasar por eso a una persona que, en definitiva, no está enferma ni tiene problemas y si así lo fuera y la bisexualidad fuera considerada como una enfermedad… lo que menos hay que hacer con un enfermo es eso. Si alguna vez has tenido que enfrentar el rechazo y la humillación lo entenderías perfectamente y si no… solo hay que poner un poco de voluntad. Quizás te importe muy poco ésta carta que estoy haciendo, pero para mí es muy importante poder enfrentarte aunque sea de manera anónima. No me juzgues por eso. En cierto modo vos sos el menos indicado en juzgar a los demás. Lo único que pido es que entiendas que con un poco de tu ayuda librarías un peso enorme de encima a muchas personas como yo que somos castigadas por ser quienes somos como si fuera un crimen… un crimen por haber nacido. Nada más. Solo pido un poco de tu voluntad.